El Emisario Real volvió a Cocentaina el día 5 a las tres de la tarde, y desde las puertas de la iglesia de Santa María recibió a los niños en el instante en el que tocaron las campanas del templo; un momento en el que los Pajes aprovecharon para cambiar la paja depositada en los balcones de las casas por bandejas de dulces y golosinas.
A la misma hora Melchor, Gaspar y Baltasar visitaron la Parroquia del Salvador y Cáritas de esta misma iglesia que es la encargada de coordinar la organización de la Cabalgata de los Reyes Magos que comenzó a las siete de la tarde desde la parte alta del Passeig del Comtat. El desfile llegó hasta El Pla y allí, ante el Palau Comtal, se realizó la Adoración a la Sagrada Familia junto al volteo de las campanas del Monasterio de la Mare de Déu del Miracle y el disparo de efectos pirotécnicos.