Fiel a su tradición, durante los días 6 y 7 de enero de cada año, el pueblo de Cañada celebra su Auto Sacramental de los Reyes Magos. La representación se desarrolla de manera itinerante hasta llegar a escenarios fijos. Esta característica obliga al público a realizar constantes desplazamientos para seguir la trama de la historia a la vez que contribuye a la verosimilitud del argumento.
Resulta difícil datar con exactitud la fecha de comienzo de la representación del Auto Sacramental de los Reyes Magos de Cañada. Don Manuel Ocaña, paciente recopilador de la historia de Cañada al que debemos la autoría del único libro que versa acerca de nuestros orígenes y costumbres, apunta como inicio del Auto una fecha comprendida entre 1785 y 1797.
En su afán por recopilar datos sobre nuestra fiesta cita la conversación realizada con José Ferrándiz Galvañ, el «Tio Roj», en la que este hace referencia a personajes interpretados por su abuelo Francisco Ferrándiz. Se comprobó la existencia de Francisco Ferrándiz en el censo de población de 1797.
Este dato, junto a la fecha de la primera edición de la Infancia de Nuestro Señor Jesucristo de Gaspar Fernández de Ávila, libro en el que se basa el Auto Sacramental, nos hace pensar que el inicio de las representaciones tuvo lugar en alguna de estas fechas.
En cuanto a documentación escrita que confirme esta teoría, la información más antigua de que se dispone es una refundición de los estatutos de la Junta de Reyes de 1886 que junto a la edición más antigua del libro de Gaspar Fernández de Ávila conservada en Cañada, que data de 1870, nos permite asegurar que la fiesta ya existía a finales del siglo XIX.
Podemos asegurar con toda certeza que nos encontramos ante una fiesta centenaria de gran riqueza cultural.
El salón de actos del Club INFORMACION acogió ayer tarde la primera representación en Alicante del Auto de los Reyes Magos de Cañada. Esta escenificación, promovida por el Patronato de Reyes Magos de la citada localidad alicantina, es un preludio de las fiestas navideñas.
Su origen era una representación teatral muy humilde, de labradores, que tomaba el municipio como escenario y a sus vecinos por actores.
Esta tradición se ha mantenido pues Manuel Ocaña, paciente recopilador de la historia de Cañada, apunta como inicio del Auto una fecha comprendida entre 1785 y 1797. En cuanto a documentación escrita que confirme esta teoría, la información más antigua de que se dispone es una refundición de los estatutos de la Junta de Reyes de 1886, que junto a la edición más antigua del libro de Gaspar Fernández de Ávila conservada en Cañada, que data de 1870, permite asegurar que la fiesta ya existía a finales del siglo XIX. En 1964 se celebró el bicentenario de esta fiesta.
Desde esta última fecha ha alcanzado las formas teatrales que hoy conocemos y que reúnen cada año en Cañada a a los vecinos y numerosos visitantes atraídos por esta singular representación.