El Ayuntamiento de Villena ha culminado los trabajos de modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) con el objetivo de reforzar la protección del suelo no urbanizable y establecer un mayor control sobre los usos permitidos en el término municipal. El documento definitivo será remitido a la Conselleria para continuar con su tramitación administrativa.
El concejal de Ordenación Urbanística, Francisco Iniesta, ha explicado que esta modificación, iniciada en abril de 2024, ha sido elaborada por los técnicos municipales de Urbanismo y Medioambiente, en coordinación con la empresa adjudicataria, y responde a la necesidad de ordenar el suelo no urbanizable común desde criterios técnicos, normativos, ambientales y paisajísticos.
El estudio realizado fija en un 5,2 % el porcentaje de suelo no urbanizable común disponible para nuevos usos, al que se suma un 3,9 % correspondiente a actuaciones previamente autorizadas que no se ven afectadas por la nueva regulación. Iniesta ha señalado que, a partir de ahora, cualquier nuevo proyecto deberá ajustarse a los condicionantes establecidos en esta modificación, lo que permitirá un mayor control del desarrollo territorial y evitar usos inadecuados del suelo.
Una vez remitido el expediente a la Conselleria, esta dispondrá de un plazo de seis meses para emitir el informe ambiental y de hasta 18 meses para completar la tramitación definitiva del documento.
Protección ambiental y control de las fotovoltaicas
En el mismo marco de defensa del territorio, el concejal ha informado sobre la moción presentada por el grupo Verdes de Europa en el último Pleno municipal, centrada en la protección del entorno natural y paisajístico de Villena frente a la implantación de plantas solares fotovoltaicas. La iniciativa está vinculada a una Proposición No de Ley registrada en el Congreso de los Diputados y alerta del “uso abusivo del suelo” en este tipo de proyectos.
Actualmente, Villena cuenta con 13 instalaciones fotovoltaicas autorizadas. La moción plantea la modificación de la normativa estatal, de forma consensuada con comunidades autónomas y ayuntamientos, para reforzar la protección ambiental y paisajística, revisar las autorizaciones que afecten a zonas frágiles o protegidas y paralizar aquellos proyectos que tengan recursos pendientes de resolución firme.
Recuperación del plan de protección del paisaje agrario
Por último, Iniesta ha anunciado la reactivación del Plan de Acción Territorial para la protección de los paisajes agrarios vinculados al cultivo del vino de Alicante, un instrumento impulsado en la anterior legislatura y que quedó paralizado tras el cambio de gobierno autonómico.
Este plan afecta directamente a Villena, especialmente en áreas próximas a Fontanars y la Sierra de Salinas, y contempla la celebración de reuniones sectoriales para definir nuevas medidas de protección que se incorporarán a la normativa vigente. El objetivo es preservar estos espacios agrícolas de alto valor histórico, patrimonial e identitario y garantizar su conservación frente a futuros desarrollos.







