Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y con la colaboración de la Policía Nacional de Colombia, han desarticulado una organización criminal asentada en la provincia de Alicante y con conexiones en Colombia, dedicada a la importación de cocaína oculta en productos alimentarios. La red utilizaba pulpa de fruta enviada desde el país sudamericano y un laboratorio clandestino establecido en una finca próxima a Sax, además de instalaciones en Monóvar, Elda, Petrer, Castalla y la propia ciudad de Alicante.
La operación se inició tras la intervención en Colombia de un contenedor con destino España que transportaba pulpa de fruta impregnada con 955,5 kilos de cocaína. A raíz de esa actuación, los investigadores localizaron en Monóvar un cargamento idéntico de 27 toneladas de pulpa de fruta almacenado en una nave vinculada a la misma empresa alicantina. Los análisis preliminares realizados por Sanidad confirmaron que este lote no había llegado a ser contaminado con droga, pese a que el responsable mercantil de los envíos era el mismo. En total, once personas han sido detenidas.
Investigación centrada en una empresa alicantina y su red en varias localidades
Las pesquisas comenzaron en 2024, tras detectarse importaciones de pulpa de fruta procedentes de Colombia con destino a una sociedad radicada en la provincia de Alicante. Desde ese momento, los investigadores trabajaron para identificar a los responsables, seguir el recorrido de la mercancía y localizar el laboratorio donde se realizaría la extracción de la cocaína.
En una primera fase, se llevó a cabo un control documental de las importaciones y se identificó a los tres principales investigados. El líder de la organización se mantenía en un segundo plano, tomando decisiones sin aparecer vinculado formalmente a la empresa. Otros dos miembros figuraban como socios de la sociedad instrumental y se encargaban de la logística de las importaciones.
En una segunda fase, en mayo de 2025, se detectó la llegada de un nuevo contenedor que fue descargado en una nave vinculada a la empresa en Monóvar, dentro de la red de instalaciones repartidas por distintas localidades alicantinas.
Seguridad extrema y uso de enclaves aislados en Sax y otras poblaciones
La organización empleaba un sofisticado protocolo de seguridad. Para almacenar y tratar la mercancía, utilizaba fincas rurales y naves aisladas en zonas poco transitadas, como la finca situada en las inmediaciones de Sax, donde se instaló el laboratorio clandestino. Estas ubicaciones reducían el riesgo de ser detectados por vecinos, cámaras de seguridad o servicios municipales, ya que los procesos químicos de extracción de cocaína generan olores, residuos y movimientos sospechosos.
Además, la red criminal utilizaba vehículos a nombre de terceros, cambios rápidos de titularidad, conductores interpuestos y rutas y horarios poco habituales para dificultar la trazabilidad de la mercancía entre la empresa ubicada en Alicante y los puntos de manipulación reales situados en Sax, Monóvar, Elda, Petrer y Castalla.
Contenedor intervenido en Colombia y registros en cinco municipios alicantinos
En septiembre se detectó un nuevo contenedor de pulpa de fruta con origen en Colombia y destino a la mercantil alicantina investigada. La Policía Nacional de Colombia inspeccionó el envío en origen y comprobó que contenía 955,5 kilos de cocaína impregnados en la pulpa.
Con esta información, se preparó el operativo en España. Los días 4 y 5 de noviembre se practicaron cinco entradas y registros en las localidades alicantinas de Sax, Elda, Monóvar, Petrer y Castalla, que se saldaron con once detenciones y el desmantelamiento del laboratorio clandestino.
En la finca próxima a Sax, donde se ubicaba el laboratorio, se incautaron más de 1.000 kilos de precursores y sustancias químicas (sosa cáustica, amoniaco, ácido sulfúrico, ácido nítrico, acetato de etilo, gasolina, etc.), así como todo el material necesario para la elaboración de cocaína (ollas de acero inoxidable, bidones de gran capacidad, papel tamizador, balanzas, probetas, etc.). Allí también se localizaron 10 kilos de cocaína y los restos de una plantación indoor con 2.330 gramos de marihuana listos para el consumo.
En la nave alquilada por la sociedad investigada en Monóvar, los agentes hallaron las 27 toneladas de pulpa de fruta repartidas en 65 bidones metálicos de 200 kilos y 1.216 cajas con 24 paquetes de 500 gramos cada una. Los análisis preliminares de Sanidad confirmaron que este lote no estaba contaminado con sustancia estupefaciente.
En los restantes registros practicados en Elda, Petrer y Castalla se intervinieron tres vehículos, numerosos dispositivos electrónicos, documentación, dinero en efectivo y una máquina contadora de billetes, elementos todos ellos vinculados a la actividad de la red.
Los detenidos han sido puestos a disposición de los juzgados de instrucción de guardia de Alicante, Elda y Novelda, completando así una operación que ha afectado a buena parte del eje interior de la provincia de Alicante y que ha permitido desmantelar por completo la infraestructura de esta organización criminal vinculada al narcotráfico internacional.
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