La Unión de Festejos de Petrer inicia una nueva etapa tras la elección de Francisco Cerdá Brotons, más conocido como “Paco Castalla”, como nuevo presidente de la entidad festera. En la votación celebrada el pasado 21 de junio, un total de 220 festeros respaldaron su candidatura, frente a 51 votos en contra y 2 en blanco, otorgándole así un amplio apoyo para ponerse al frente de las fiestas de Moros y Cristianos en honor a San Bonifacio, Mártir. A partir del próximo 11 de julio, Cerdá asumirá oficialmente el cargo.
Días antes de la votación, Paco Castalla concedió una entrevista a Intercomarcal Televisión, donde expuso su visión sobre el presente y el futuro de la fiesta petrerense, así como su postura sobre algunas de las polémicas que han surgido en los últimos años. En esa conversación dejó claro que su opinión era una más dentro de la comunidad festera, subrayando que cualquier decisión o proyecto deberá ser fruto del consenso de todos los implicados.
Cerdá no es un desconocido para la familia festera de Petrer. Labrador de vocación y tradición, ha sido presidente de su comparsa, los Labradores, y también ha desempeñado el cargo de vicepresidente de la Unión de Festejos. Ahora inicia una aventura nueva pero bien conocida: «Siempre he sentido la inquietud de trabajar por la fiesta y no me arrepiento, pues cuando se hacen las cosas y salen bien, es una gran satisfacción», manifestó a este medio.
Para esta etapa, se ha rodeado de un equipo de personas «trabajadoras, con experiencia y con muchas ganas de trabajar por y para la fiesta», en palabras del propio presidente. Le acompañarán Pepe Ángel como vicepresidente, Elisa Bernabé como secretaria, Verónica Leal Candela como tesorera, y Nieves Candela, Ramón Tortosa y Mª Carmen Gómez como vocales. A ellos se suman los 21 miembros que integran la mesa de la Unión de Festejos, incluyendo a los presidentes de las diez comparsas, todos con el compromiso de trabajar de forma coordinada.
Con un mandato de cuatro años por delante, Paco Castalla asume el reto de dar continuidad a los avances de la etapa anterior y afrontar nuevos desafíos: «La fiesta ha crecido, ya somos 4.700 festeros, y eso es bueno, pero hay actos que se han alargado demasiado y será necesario reorganizarlos», explicó.
Sobre posibles cambios, se mostró prudente y dialogante: «Tengo ideas, pero serán solo propuestas para debatir en la mesa de trabajo; allí se decidirá qué hacer y, si algo no funciona, no habrá problema en volver atrás».
Por último, quiso agradecer el respaldo recibido, el trabajo de la directiva saliente y se comprometió a trabajar para que esas 51 personas que votaron ‘no’ puedan ver pronto resultados que les hagan cambiar de opinión.