Pepa Fernández, directora y presentadora de No es un día cualquiera de Radio Nacional de España fue la presentadora y madrina de esta iniciativa, coincidiendo con su presencia en la localidad con motivo de la campaña Un Juguete una Ilusión.
El evento contó con el apoyo de AEFJ (Asociación Española de Fabricantes de Juguetes) y de su presidente Jose A. Pastor, así como con representantes de la Fundación Crecer Jugando.
La Maletita es una historia mágica que cuenta cómo un niño y una niña llegan a Onil y descubren una casa mágica habitada por muñecas. La acción transcurre en dicha casa que está inspirada en la Casa de lHort, edificio señorial que fue residencia del Cardenal Payá, y que hoy alberga la magnífica colección del Museo de la Muñeca de Onil. Se trata de un relato infantil que, en forma de cuento, explica la esencia del Museo de la Muñeca a partir de los personajes que forman parte de su peculiar espectáculo de Muñecas Vivientes.
El objetivo de este relato es el revivir de la infancia y la mágia de los sueños.Para poder plasmar esta idea y que el relato del cuento sea lo más real posible, se traslada toda la acción al propio Museo de la Muñeca, y será desde allí, dónde se fusione esa ilusión con la realidad. La creación y transformación de los personajes en Muñecas, y el espacio en Museo, hará que sea imposible separar una cosa de otra.
La publicación de este cuento es una iniciativa de Fabiola Juan que ha contado con el apoyo del Museo de la Muñeca (del que es responsable), así como de varias empresas y particulares de la localidad. El proyecto se completa con una colección de muñecas fabricadas por empresas locales que representan los personajes del cuento y del Museo. El cuento y las muñecas tiene una cuidada presentación, dentro de una maleta y con una estética inspirada en los primeros años del Siglo XX.
Su puesta en marcha ha supuesto una importante inversión 100% privada cuyo objetivo es dar visibilidad al museo y dedicar una parte de los beneficios, a mantener la actividad del Museo de la Muñeca. En poco más de dos años, y con un volumen de visitantes de más de 50.000 personas, este museo se ha convertido en un referente nacional en la conservación y difusión de la cultura que la industria muñequera ha impreso y sigue imprimiendo en la comarca de la Foia de Castalla y en la localidad de Onil.