Declaración de lo que se piensa hacer en una materia o escrito que expone los detalles de un acto o similar se llama programa. Programa se ha de tener tanto para realizar como para destruir. Todo cuanto se tenga que realizar, que incluya a terceros, se debe llevar a cabo bajo un programa, de antemano, preconcebido.
No me vale que Juanjo, como le llama Aureliano, discrepe de él con saña literaria, haciendo querer valer, que por falta de fondos que administrar, no hay ideas preconcevidas y por tanto no hay programa.
Es la prinera vez que veo afirmar que el dinero hace que desaparezcan las ideas, cuando siempre han sido primero las ideas y despues ver como se realizan.
Para dar a conocer un Progrma de Gobierno o los convenios alcanzados entre varios grupos para gobernar no es necesario dinero ni que transcurra un periodo de tiempo dilatado, ¡no, no es necesario eso! solamente hace falta dar a conocer, al publico, lo que se piensa hacer, porque, repito, para pensar no es necesario el dinero, para lo que será necesario es para llevar a cabo algunos de los proyectos y si no se puede realizar ninguno para tener ideado la mejor forma de subsistir. La salida airosa no puede ser siempre la falta de dinero porque de ser asi ¿de que me sirve a mí un Gobierno que tira la toalla?
¿Que puede hacer por el pueblo quien no pone en practica el concepto de economía?.
«Con financiaciones firmes cualquier programa es mas facil de elaborar y ejecutar, sin centimos a ver quien hace milagros». Esto es lo que afirma, literalmente, Juan José Torres en el Periodico de Villena en un cruce de articulos con Aureliano Buendia ¿cree eso de verdad?. Y sigue diciendo en el mismo escrito » que nadie crea que según lo descrito, todos los politicos son iguales. Hay diferencias abismales entre unos politicos y otros que hay que reconocer». Desde luego que hay diferencias, pero no las que pretende destacar. Ahí es donde se le ve el plumero de forma descarada, porque para justificar la inoperancia de algunos, intenta razonar lo que sería un presentimiento superfluo, sobre una situación inexistente, porque Sr. Torres quien
gobierna el Ayuntamiento no es el PP, prepotente, creido, mentiroso y tantas cosas más, sino el inoperante, desaparecido y falto de programa
«Tripartito», al que trata de justificar sin conseguirlo.
Disentir de opiniones más que un honor es un derecho y casi un deber de todo ciudadano para tratar de conseguir que florezca la verdad.
Insisto en lo dicho para hacer un programa no es necesario dinero alguno, no confundan presupuesto con programa, que son dos conceptos por completo diferentes, el segundo habla de acuerdos, concesiones, comportamientos e ideas y el primero, friamente, de realidades con las correspondientes partidas presupuestarias de lo que se puede o no realizar.
Quien «escribe sin presiones ni censuras», omite, ¡claro está!, deliberadamente, que el Ayuntamiento gestionará anualmente más de 4.000 millones, lo digo en pesetas para que todos me entiendan y creo que el pueblo merece y el Tripartito tiene la obligación de decir la utilidad que dará a esos fondos que en nuestro nombre gestionará, no por decisión nuestra, sino por alianzas politicas ajenas a la voluntad popular.
Por una vez, al menos, estoy de acuerdo con Aureliano Buendia en que para nada es excesivo que se dude del «sin-programa» del Tripartito, pues ni el ni yo pedimos ningún milagro, solamente reclamamos un derecho a saber, ante un mutismo absoluto de nuestros gobernantes a quienes con tanto afán defiende en su papel de » abogado del diablo»
el Sr. Torres que se jacta en decir » que la demagogía sigue siendo un embaucador recurso». Con esta afirmación retrata perfectamente al Tripartito que no pasa de ser un gobierno embaucador y nada sincero.
Y se retrata usted mismo con esa afirmación, demagogica, a la que dá valor, con desprecio absoluto del pueblo llano.
Ernesto Pardo