Una figura a tamaño real de Camilo Sesto, costeada íntegramente por admiradores del cantante mediante aportaciones voluntarias, ha encendido la polémica en Alcoy en las últimas semanas. El motivo principal: la ausencia de un emplazamiento concreto y los obstáculos legales para situar la pieza en un espacio público sin que primero pase a ser propiedad del Ayuntamiento.
La cuestión salió a colación en el último pleno municipal tras una interpelación del Partido Popular. En esa sesión, el equipo de gobierno dejó claro que, por exigencias normativas, no es viable ubicar la escultura en suelo público mientras no sea de titularidad municipal.
La obra, un cuerpo entero de dos metros de altura recubierto de bronce —pero no macizo— lleva la firma de Manuel García Rey, el mismo escultor que realizó el busto presente en el homenaje cuando llegaron las cenizas del artista a su ciudad natal. El encargo lo promovió Paquita Ruiz, fundadora de la Asociación Cultural Camilista de España, quien coordinó la recaudación mediante transferencias bancarias y bizums de seguidores, alcanzando un presupuesto de 25.000 euros.
El sitio más deseado por los impulsores es el parque de La Glorieta, por su fuerte simbolismo: allí debutó Camilo Sesto y forma parte del recorrido turístico camilista. No obstante, el ejecutivo local —compuesto por PSPV-PSOE y Compromís— ha optado por la cautela y no ha cerrado ninguna localización definitiva. Como paso previo, la semana pasada se celebró un encuentro entre responsables municipales —el alcalde Toni Francés, el vicealcalde Àlex Cerradelo y los ediles Ignacio Trelis y Raül Llopis— junto a miembros del Club de Camilo Sesto en Alcoy, con su presidente Gilberto Molina al frente.
Avances y puntos de consenso
En esa reunión se acordó que el Club aporte informes técnicos sobre la figura, para comprobar si reúne las condiciones necesarias para instalarse al aire libre, dado que se desconoce su resistencia frente a la climatología. El consistorio, por su parte, reiteró su disposición para buscar la localización más adecuada dentro del marco legal vigente.
Toni Francés ha salido al paso de las críticas de la oposición y de algunos admiradores del cantante, recordando que ha sido este Ayuntamiento el que revitalizó la relación con Camilo Sesto, le concedió la Medalla de Oro, lo nombró Hijo Predilecto, promovió el mausoleo en el cementerio y está impulsando un museo dedicado a su figura. Subrayó que el homenaje institucional ha sido constante y que la intención es mantenerlo, cumpliendo siempre con la normativa.
Por su parte, Gilberto Molina aclaró que el Club no encargó la estatua, pero respalda la iniciativa de Paquita Ruiz y remarcó la necesidad de no dejar la obra “guardada en un garaje”. También criticó la demora administrativa, aunque valora positivamente la reunión y se muestra abierto a estudiar otras ubicaciones. “La Glorieta sería la opción ideal, pero estamos dispuestos a valorar alternativas dignas”, afirmó.
Desde el Partido Popular, la concejala Isabel Balaguer ha reclamado al gobierno local una solución para los camilistas: “Camilo Sesto dio sus primeros pasos en La Glorieta, es el lugar con más carga emotiva y cultural para ubicar esta estatua”, declaró. Para el PP, el retraso es injustificable y demuestra poca sensibilidad con uno de los símbolos más reconocidos de la ciudad.
Mientras tanto, la escultura continúa almacenada en el taller sevillano del escultor, a la espera de que se formalice su cesión al Consistorio y se cumplan los requisitos para una instalación con todas las garantías. Los impulsores mantienen su deseo de inaugurarla el próximo 16 de septiembre, coincidiendo con el que sería el 79 cumpleaños de Camilo Sesto.