El bando de la media luna presentó un espectacular Sultanato que se ganó los aplausos del numeroso público que llenó las calles.
Miles de personas, muchos extranjeros y vecinos de localidades próximas, se agolparon el jueves en las calles del centro de Aspe para ver a las filás desfilar. Y el espectáculo no defraudó. Cerca de 1.200 festeros lucieron galas y armas en una noche para el recuerdo porque había llegado el primer gran acto de las Fiestas de Moros y Cristianos en honor a la Virgen de las Nieves.