Cuando se llega a Cañada en las primeras horas del día 6 de Enero, el visitante se encuentra con un clima frío, propio de la época. Si se ha madrugado más de la cuenta, podrá observar por las principales calles del pueblo un trasiego de pajes, guardias, reyes, etc. que se preparan para el inicio de la representación. Mientras esto ocurre, “El Postellò” recorre con su caballo las calles del pueblo. Aproximadamente a las 9:30 horas, la Banda de Música realiza un pasacalle recogiendo a los asistentes para dirigirse a la vega de “El Pinaret”, lugar de inicio de la fiesta.
En este paraje se produce el encuentro de los tres Reyes Magos que de diferentes puntos vienen siguiendo a una gran estrella. Una vez aleccionados por Melchor, se dirigen al Palacio de Herodes con el fin de recabar información del lugar del advenimiento del Mesías.
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En el Palacio, situado a la entrada del pueblo, se encuentra Herodes que ha recibido la noticia de la presencia de unos Reyes extranjeros en sus dominios. Los manda llamar para conseguir información del lugar del nacimiento, con otros fines más oscuros a los de los tres Reyes Magos. Estos, con la ingenuidad propia de la buena fe, prometen a Herodes avisarle en cuanto encuentren el lugar para que también él pueda ir a adorar al Recién Nacido.
Tras el encuentro con Herodes, los tres Reyes Magos se dirigen a la Plaza Mayor de la población, lugar donde se sitúa la cueva donde la Virgen María ha dado a dado a luz a Jesús. Una vez llegados ante Él los Reyes realizan una ofrenda al Niño Dios. Más tarde un Ángel es el que da aviso a José sobre las verdaderas intenciones de Herodes y conmina a este a que huya a Egipto. Por su parte los tres Reyes Magos deciden volver a sus países de origen sin dar aviso a Herodes. La última escena de este día se realiza en el palacio de Herodes, que al verse burlado por los Reyes extranjeros, envía a sus tropas en busca de la Sagrada Familia.
Desde 1964, la representación original se amplió a un “segundo día” en el que se ponen en escena la Huida a Egipto y la degollación de los Santos Inocentes.