Una climatología adversa, desapacible y con lluvia incluida, no fue obstáculo para que El Campello alzara bien alto anoche su voz contra la violencia de género. En lo que posiblemente fuera la primera marcha de protesta celebrada este año en España por motivo del Día Internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer, la localidad salió a la calle para participar en el acto central del intenso calendario organizado por la Concejalía de Igualdad que dirige la edil Mercé Pairó (Cs). A la marcha solidaria se sumó una amplia representación institucional y política, con presencia de la alcaldesa en funciones Lourdes Lledó (PP), y concejales de PP, Cs, PSOE, Compromís, Podemos y EU, además de diferentes colectivos cívicos y ciudadanos que, bien provistos de paraguas, recorrieron la distancia que media entre el Ayuntamiento y la Casa de Cultura tras una pancarta en la que se podía leer la leyenda El Campello contra la violencia de género. Basta ya. Una idea a modo de consigna corrió pronto entre los manifestantes: El cielo llora por cada una de las víctimas de maltrato, comentaban.
Fue una tarde-noche reivindicativa, que comenzó con la audición de la canción La puerta violeta, de la cantautora Rozalén, entonada por Julia y Reyes, dos integrantes de la Asociación Clave de sol y fa. Cuando los manifestantes llegaron a las puertas de la Casa de Cultura, les esperaba la mezzosoprano Rosario para dedicar a los participantes una sentida pieza alegórica a la causa.
Ya en el interior del recinto, los asistentes fueron recibidos al son del violonchelo de Fernando, mientras los organizadores del acto repartían 51 rosas blancas con un lazo violeta en el que se podía leer los nombres de las 51 mujeres asesinadas en lo que llevamos de año en España por sus parejas o exparejas. Fue el mismo público el encargado de identificar en voz alta los nombres de las víctimas.
Fue un acto sencillo y respetuoso y con fuerte dosis de solemnidad. La concejala Mercé Pairó lo dijo bien claro: Hoy es un día lluvioso y gris en El Campello, pero nos hemos reunido para denunciar los fatídicos días oscuros, negros, que sufrieron las víctimas mortales de esta lacra a la que hay que poner fin, y para repudiar la injusticia de morir solo por el hecho de ser mujer. Para la edil, la consecuencia más infame del machismo es la muerte, y apeló a la necesaria colaboración de los hombre para erradicar definitivamente las desigualdades que padecemos todos.
El acto concluyó con el visionado de varios cortometrajes que, por su temática, impactaron en el público, como El orden de las cosas, de José Esteban Alenda; No aguanto a tus padres, de Javier Cano, o Libre directo, dirigido por Bernabé Rico Herrera.
El Campello, 23 de noviembre de 2019