Este largo puente del día de la Comunidad Valenciana y del Pilar, tendrá que servir para que el concejal, Juan Richart, reflexione sobre el contenido de la reunión que mantuvo con la Alcaldesa.
Como recordarán ustedes, Richart, dejó bien claro que la postura que toma en dejar las delegaciones de Obras y Servicios sería irrevocable si no cesa a su asesor de ocio.
No puedo permitir que una persona que está en el Ayuntamiento me amenazara y además quería verme muerto, comentó en su última comparecencia pública.
Amén de otros temas que se trataron en el encuentro, la primera autoridad le deja que medite durante estos días de fiesta. El martes y trece, la máxima autoridad local, tendrá que recibir contestación, si el concejal sigue con su postura, la Alcaldesa firmaría el decreto y desde ese momento ya no cobraría su retribución y no tendría responsabilidad en el equipo de Gobierno pasando las concejalías a otro miembro que designe Celia Lledó.
Fuentes consultadas, aseguran que esta decisión del cese del asesor de ocio depende de la propia Alcaldesa y no del Pleno. Suma y sigue.