CANFALI EL SEMANAL
Nieves Berenguer Martínez es la portavoz y presidenta del PP de Aspe desde hace siete años y tres legislaturas. De verbo sosegado, todo apunta a que encarará los próximos comicios locales como candidata de su partido a alcaldesa, en un mano a mano de ignoto desenlace en el que disputará el puesto a Roberto Iglesias. En la política local se caracteriza por su acercamiento a los problemas más inmediatos de los ciudadanos, mientras que en otras esferas se distingue por mantener al PP de Aspe al margen de las luchas intestinas que corroen a los populares valencianos. Lo mismo se le ve en las reuniones de los zaplanistas que en cónclaves campsistas. En los grandes temas de la localidad defiende el trasvase del Júcar desde Cortes de Pallás, se opone al nuevo Plan General y también a los grandes desarrollos urbanísticos previstos en La Alcaná.
CÉSAR GONZÁLEZ
– ¿Cómo valora el período de gobierno del PSOE con Roberto Iglesias al frente?
– De retroceso, están dado claras muestras de su incapacidad para gobernar este pueblo. No hay una directriz, se limitan a ir haciendo lo que va surgiendo, sin más. Cualquiera puede observar cómo Aspe durante este tiempo ha dado un parón, teniendo como tienen la posibilidad de desarrollar su acción de gobierno basada en principios o convicciones sociales, pero no la han sabido desarrollar. En Hacienda, por ejemplo, han sido incapaces de llevar a cabo una política fiscal, y se limitan a recaudar impuestos. Pero además no hay un compromiso con Aspe. Hace unos meses su portavoz afirmaba que se limitarán a hacer de su programa electoral hasta donde se pueda, por lo que el documento con el que se presentaron a las elecciones pidiendo el voto de los vecinos ha resultado ser una propaganda vacía.
– ¿Y cómo ha sido el papel de la oposición?
– Se ha ejercido una oposición responsable, crítica y activa, apoyando ciertas modificaciones del Plan General de 1995, un nuevo instituto en la zona Almohaja, la creación de un centro de salud o la financiación del aire acondicionado del mercado, por ponerle algunos ejemplos. Hemos participado en el reglamento del Consejo de Sanidad, en el de la Casa de la Juventud, aportando que estén exentos de pago los socios con dificultades económicas, e incluso a iniciativa nuestra la creación en Aspe de puntos limpios para mejora del medio ambiente. Ha sido un año con una actividad intensa por parte del PP, en el que hemos fiscalizado al gobierno municipal con más de un centenar de propuestas.
– ¿Considera que en este período la calidad de vida, la transparencia y la convivencia han mejorado o empeorado en el municipio?
– La convivencia en este pueblo siempre ha sido buena, por la sencilla razón de que las gentes que viven aquí son acogedoras. En cuanto a la transparencia del equipo socialista, ya se ha visto lo ocurrido por ejemplo con el expediente del aparcamiento subterráneo que pensaban hacer, al que dieron carpetazo sin contestar las alegaciones y sin dar la explicación que el pueblo merecía, o ahí están los expedientes de posibles irregularidades urbanísticas, que todavía estamos esperando la convocatoria del concejal para estudiar la situación que han creado.
En lo que respecta a la calidad de vida, la falta de adaptación para discapacitados que hay en nuestro pueblo, la falta de aparcamiento en la zona centro, la insuficiente conciliación de la vida laboral y familiar que tienen las mujeres de aquí, el clima de inseguridad que padecemos, la falta de mantenimiento de las zonas verdes o el estado lamentable de muchas de nuestras calles y aceras… denotan que es evidente la falta de esfuerzo por mejorar lo cotidiano que hace la vida mucho más agradable.
– ¿Considera que se ha creado crispación social a lo largo de este año y medio de mandato? Me refiero a proyectos como el párking, por ejemplo.
– Sí, porque el PSOE incurre en dos actuaciones que nunca un político ha de hacer, ya que se debe a los vecinos que le han puesto ahí. Por un lado, no atendiendo y solucionando las deficiencias que se le reclaman, y por otro actuando de espalda a la gente. Recuerde que su forma de actuar consiguió lo que yo nunca antes había visto en este pueblo: poner en la calle a miles de personas en protesta por lo que querían hacer en el parque, que contó con el esfuerzo y sudor de muchos aspenses. Mantuvieron una actitud de desprecio ante lo que era un clamor popular, argumentando que los vecinos de este pueblo estaban siendo manejados, e incluso llegaron a propiciar el enfrentamiento entre aspenses sin que sepamos qué interés había tras ello. Ahora da la impresión de que nos están queriendo castigar por aquello dejándo abandonado el mantenimiento del parque, pero no se lo vamos a consentir a pesar de los insultos constantes que recibimos.
– ¿Cuáles son las principales carencias que, a su juicio, existen en Aspe?
– Nuestra principal carencia es sin duda el agua, que es el problema más acuciante que padecemos. Aspe también necesita un nuevo centro de salud, instalaciones deportivas en los barrios, una diversificación y cualificación de la industria, una reinstalación del centro histórico, dotación de suelo terciario, solucionar la falta de aparcamiento…
– ¿Cómo se podrían solucionar todo eso?
– A través de distintos planes en los que hay que priorizar las necesidades que tiene este pueblo a corto, medio y largo plazo, y actuar sobre ellas teniendo muy claro el objetivo que se quiere conseguir. Con respecto a la carencia del agua que extralimita el ámbito local, fomentar políticas de ahorro y reutilización, pero además de los Canales del Taibilla, los trasvases son necesarios y el del Júcar es básico para nosotros. Por tanto, nuestra apuesta ha de ser firme y decidida.
– ¿Qué postura defenderá su grupo ante la más de 4.000 firmas contra el avance del nuevo PGOU?
– La basada en criterios de sostenibilidad y racionalidad ambiental, social y económica para nuestro municipio. El nuevo PGOU debe ser un diseño que obedezca al interés general de Aspe sin injerencia de ningún tipo de interés particular.
– ¿Qué opinión le merece la situación medioambiental del municipio? De todos es conocido el caso de los vertidos en Upanel.
– Deficiente en muchos aspectos. La mayoría de las zonas naturales sufren una importante degradación, la Rafica o el Tarafa, que están en el mismo pueblo, presentan una situación lamentable. Padecemos una contaminación de industrias cercana al núcleo urbano. En cuanto al vertedero, se han recibido miles de toneladas de basura, lo que reduce drásticamente su vida útil. Desde mi grupo apostamos por la reutilización y por la clausura inmediata de este vertedero.
– ¿Es su partido una alternativa de gobierno creíble? ¿Por qué?
– Sí. Además de avalarnos la gestión reconocida por los ciudadanos en el ámbito nacional, regional y provincial, tengo que decir que en el ámbito local tenemos la experiencia, la ilusión y el conocimiento para poder ser gobierno dentro de un año. Para nuestro grupo la acción política tiene un objetivo claro, y es buscar soluciones y planificar metas ambiciosas y realizables para Aspe y con los vecinos de Aspe. Dentro de estas metas ocupa un lugar prioritario, y nos vamos a volcar, las políticas sociales y de familia.
– ¿Si el PSOE pierde la mayoría absoluta, podría perder el gobierno municipal?
– Por un lado es necesario que pierda la mayoría absoluta, porque se está gobernando sin atender y escuchar a los vecinos, con una falta de actitud democrática que no beneficia a nadie. Y por otro lado es necesario que se dé una alternativa en el poder, un cambio. El proyecto socialista acabó con la desaparición de Miguel.
– ¿Existe una alianza entre PP y EU, tal y como sostiene el equipo de gobierno, para desgastar al PSOE?
– Ni existe, ni nunca ha existido. Hemos coincidido en exigencias porque eran de sentido común, y en críticas que caían por su propio peso. Esa pinza que menciona es el argumento que utiliza el PSOE para no asumir sus fallos en lugar de rectificar lo que hace mal. El desgaste se lo hacen a ellos mismos porque son incapaces de gobernar manteniendo los compromisos que adquirieron con nuestro pueblo.
– ¿Qué postura mantiene su grupo ante el cambio del trazado del trasvase del Júcar?
– Mantenemos la postura que siempre hemos mantenido de apoyo a la toma en Cortes porque es el único trazado que cumple la finalidad para la que se proyectó, aprobando con la conformidad y el voto favorable de todos los afectados, declarado de interés general, con proyecto aprobado y declaración ambiental favorable, con la financiación de fondos europeos y con más de un 50% de su ejecución. El cambio de toma ha sido una decisión irracional porque ni el caudal, ni la calidad del agua lo justifican, además del retraso de su puesta en servicio que va a suponer el sobrecoste que lleva añadido. Este cambio únicamente obedece a una decisión política, como lo fue la derogación del trasvase del Ebro, confirmado por el propio presidente del Gobierno hace unos días en Tarragona, en el que una vez más se demuestra la falta de consideración que tiene hacia nosotros el Gobierno socialista de la nación, y lo poco o nada que cuenta el señor Pla en las decisiones de Madrid.