No existía agua corriente, por lo que el servicio de aguas potables, se remedada con las escasas fuentes públicas que había en las calles.
En años de sequía, estas fuentes sólo funcionaban dos horas por la mañana, y dos horas por la tarde, lo que originaba que los ciudadanos colocaran sus cántaros y pozales en riguroso turno, esperando la hora en que las fuentes empezaran a manar.
En 1.931 la situación se agravó, e incluso se prohibió que los niños se acercaran a las fuentes, para evitar que con sus juegos dejaran los grifos abiertos.
Ante la necesidad de realizar nuevas prospecciones y encontrar nuevos manantiales, el ayuntamiento de entonces encargó un proyecto hidrológico al geólogo tarraconense, Bartolomé Darder, el cual presentó su proyecto, indicando que la zona del Pantanet, ubicada al pie del cerro del actual Polideportivo municipal, era el lugar adecuado para perforar y obtener el caudal necesario para la población.
Los escasos recursos de las arcas municipales motivaron que este proyecto estuviera 30 años en espera.
En 1.961 la situación que se agravó por el aumento de la población, a consecuencia de la corriente inmigratoria de los años 50, por lo que el ayuntamiento de entonces, cuyo alcalde era Patricio Barceló Francés, retomó el proyecto, y contrató los trabajos de perforación, mediante créditos que fueron avalados con los bienes de los propios concejales de la corporación.
Finalmente, el 17 de junio de 1961 encontraron agua en el Pantanet, y el 9 de julio, el cura párroco de la localidad procedió a la bendición del pozo, al cual le dieron el nombre de Darder, en memoria del geólogo. Acto al que asistieron las autoridades locales y numeroso público.
Posteriormente se procedió a la construcción de nuevos depósitos de agua, y la red de conducciones de agua por todas las calles de la población.
En 1968, debido a un período de sequía, y otro importante aumento de la población, volvieron los problemas de escasez de agua, lo que motivó la realización de un nuevo estudio geológico, y se procedieron a realizar nuevas perforaciones en el Barranc dUll de Canals.
Obras que finalizaron en 1971, y felizmente, con los pozos de esta zona de la Penya Roja, finalizaron los problemas de falta de agua.
Con motivo del 50 aniversario del pozo del Pantanet, desde el ayuntamiento hemos querido rendir un sencillo homenaje a los esfuerzos, desvelos y, en ocasiones, angustias que durante décadas han padecido varias generaciones de ciudadanos y sus corporaciones municipales.
La exposición consta 60 fotografías de gran tamaño (50×70), paneles, y una fuente pública de la época, habiéndose editado un catálogo de la misma.
La muestra ha sido organizada por la Concejalía de Educación, Cultura y Juventud, y la Concejalía de Obras y Urbanismo, con la colaboración de la Associació Cultural Font Bona.
La exposición se puede visitar desde el 25 de noviembre hasta el 18 de diciembre, en la sala de exposiciones de la Fundación Valor.
Ramón Albero Belda
Portavoz del Equipo de Gobierno del
Ayuntamiento de Banyeres de Mariola